En muchas páginas de Facebook, blogs y grupos pentecostales circula la noticia: “Robert Menzies fue expulsado de las Asambleas de Dios”. La farándula cristiana se alista para su casi morbosa expectación por difundir esta noticia y poder expresar su críticas, apoyo o desacuerdo hacia la decisión de las Asambleas de Dios de Estados Unidos. Y es que para muchos la decisión de la denominación estadounidense ha sido por demás sectaria, una muestra (según algunos) de intolerancia hacia quien piense distinto o se atreva a expresar desacuerdo. ¡Incluso muchos que no tienen arte ni parte dentro de la denominación o conocen su reglamento interno se apresuran a emitir juicio! El propio Menzies confirmó dicha noticia en su boletín oficial Middle Kingdom Memoirs from Bob & Joanne Menzies
Categoría: Asambleas de Dios
Calvinismo, esclavitud humana y otros males
Sí, el Evangelio es un hogar espiritual y un refugio de igualdad y respeto para todos los seres humanos: esclavos y libres, varones y mujeres, judíos y gentiles, todos sin distinción. O por lo menos debería serlo… Tristemente, la historia evidencia una serie de abusos y violaciones cometidas contra las minorías por parte de aquellos que se hacen llamar cristianos. Sin embargo, es claro que el problema no reside en el Evangelio, sino en la forma en que algunos tuercen las Escrituras o interpretan las mismas a su conveniencia y para perdición de ellos mismos y el mal de sus semejantes. Nuestra doctrina define la forma en que vemos al mundo, la forma en que interpretamos la realidad y hasta cómo tratamos a nuestro prójimo. Más allá de la soteriología, el calvinismo y el arminianismo se diferencian incluso en estas áreas.
Por qué creo que todos los niños que mueren antes de alcanzar la edad de responsabilidad son salvos
Todos los niños que mueran antes de ser moralmente responsables–sí o sí- irán al cielo. Debido a que tales seres no han llegado a la edad de responsabilidad personal ante Dios, los niños no pecan “conscientemente” y, por lo tanto, no pueden ser condenados, siendo herederos de la vida eterna. No obstante, los niños caen de tal estado de gracia el día que pecan de forma consciente y voluntaria por primera vez. Y a partir de aquel momento, necesitan creer en el evangelio para volver a alcanzar la salvación que antes disfrutaban en su estado de inocencia (a esta escuela se adhieren mayormente los arminianos).
Robert P. Menzies, vientos de cambio en la escatología pentecostal
¿Habrá por fin apertura escatológica en el pentecostalismo? Quizá no tan pronto como quisiéramos, pero este sin duda es un paso significativo. El pasado 31 de enero (hace apenas 3 días) fue publicado el libro "𝑇ℎ𝑒 𝐸𝑛𝑑 𝑜𝑓 𝐻𝑖𝑠𝑡𝑜𝑟𝑦: 𝑃𝑒𝑛𝑡𝑒𝑐𝑜𝑠𝑡𝑎𝑙𝑠 𝑎𝑛𝑑 𝑎 𝐹𝑟𝑒𝑠ℎ 𝐴𝑝𝑝𝑟𝑜𝑎𝑐ℎ 𝑡𝑜 𝑡ℎ𝑒 𝐴𝑝𝑜𝑐𝑎𝑙𝑦𝑝𝑠𝑒", escrito por el teólogo pentecostal Robert P. Menzies de las Asambleas de Dios. ¿Qué tiene esto de sobresaliente? Menzies, a pesar de ser pentecostal y asambleano, no es dispensacionalista. Menzies es amilenialista. Y esto no es algo muy común en el ámbito pentecostal, generalmente casado con el dispensacionalismo y sus postulados.
¿Qué creen los pentecostales? | Las Asambleas de Dios (XI) – El Ministerio
Nuestro Señor ha provisto un ministerio que constituye un llamamiento divino y ordenado con el cuádruple propósito de dirigir a la iglesia en: La evangelización del mundo (Marcos 16:15-20); la adoración a Dios (Juan 4:23-24); la edificación de un cuerpo de santos para perfeccionarlos a la imagen de su Hijo (Efesios 4:11; Efesios 4:16); satisfacer las necesidades humanas con ministerios de amor y compasión (Salmo 112:9; Gálatas 2:10; Gálatas 6:10; Santiago 1:2)
¿Qué creen los pentecostales? | Las Asambleas de Dios (X) – La Iglesia y su Misión
La Iglesia es el cuerpo de Cristo, la morada de Dios por el Espíritu Santo, con el encargo divino de llevar a cabo su gran comisión. Todo creyente, nacido del Espíritu Santo, es parte integral de la asamblea general e iglesia de los primogénitos, que están inscritos en los cielos (Efesios 1:22-23; Efesios 2:22; Hebreos 12:23). Siendo que el propósito de Dios en relación con el hombre es buscar y salvar lo que se había perdido, ser adorado por el ser humano y edificar un cuerpo de creyentes a la imagen de su Hijo. La principal razón de ser de las Asambleas de Dios como parte de la Iglesia es: (1) Ser una agencia de Dios para la evangelización del mundo (Hechos 1:8; Mateo 28:19-20; Marcos 16:15-16); (2) Ser un cuerpo corporativo en el que el hombre pueda adorar a Dios (1 Corintios 12:13); (3) Ser un canal para el propósito de Dios de edificar a un cuerpo de santos siendo perfeccionados a la imagen de su Hijo (Efesios 4:11-16; 1 Corintios 12:28; 1 Corintios 14:12); (4) Ser un pueblo que muestra el amor y la compasión de Dios a todo el mundo (Salmo 112:9; Gálatas 2:10; Gálatas 6:10; Santiago 1:27). Las Asambleas de Dios existe expresamente para dar continuo énfasis a esta razón de ser según el modelo apostólico del Nuevo Testamento enseñando a los creyentes y alentándolos a que sean bautizados en el Espíritu Santo.
¿Qué creen los pentecostales? | Las Asambleas de Dios (IX) – La Santificación
La santificación es un acto de separación de todo lo malo, y de dedicación a Dios (Romanos 12:1-2; 1 Tesalonicenses 5:23, Hebreos 13:12). La Biblia prescribe una vida de "santidad sin la cual nadie verá al Señor" (Hebreos 12:14). Por el poder del Espíritu Santo podemos obedecer el mandato que dice: "Sed santos porque yo soy santo" (1 Pedro 1:15-16). La santificación se efectúa en el creyente cuando este reconoce su identidad con Cristo en su muerte y su resurrección, y por fe se propone vivir cada día en esta unión con Cristo, y somete todas sus facultades al dominio del Espíritu Santo (Romanos 6:1-11; Romanos 6:13; Romanos 8:1-2; Romanos 8:13; Gálatas 2:20; Filipenses 2:12-13; 1 Pedro 1:5).
¿Qué creen los pentecostales? | Las Asambleas de Dios (VIII) – La Evidencia Física Inicial del bautismo en el Espíritu
El bautismo de los creyentes en el Espíritu Santo se evidencia con la señal física inicial de hablar en otras lenguas como el Espíritu los dirija (Hechos 2:4). El hablar en lenguas en este caso es esencialmente lo mismo que el don de lenguas, pero es diferente en propósito y uso (1 Corintios 12:4-10; 1 Corintios 12:28).
Bendición o castigo | ¿En qué consiste el «Bautismo de fuego» del cual habló Juan el Bautista?
Juan el Bautista proclamó que Jesucristo vendría y bautizaría “en Espíritu Santo y fuego” (Mateo 3:11). Pero ¿A qué se refería con eso? ¿Es el bautismo de fuego algo que deberíamos desear o evitar? Existen dos formas opuestas de interpretar este texto, una sustentada por los pentecostales y otra por el sector evangélico cesacionista.
¿Qué creen los pentecostales? | Las Asambleas de Dios (VII) – El Bautismo en el Espíritu Santo
Todos los creyentes tienen el derecho de recibir y deben buscar fervientemente la promesa del Padre, el bautismo en el Espíritu Santo y fuego, según el mandato del Señor Jesucristo. Esta era la experiencia normal y común de toda la primera iglesia cristiana. Con el bautismo viene una investidura de poder para la vida y el servicio y la concesión de los dones espirituales y su uso en el ministerio (Lucas 24:49; Hechos 1:4; Hechos 1:8; 1 Corintios 12:1-31). Esta experiencia es distinta a la del nuevo nacimiento y subsecuente a ella (Hechos 8:12-17; Hechos 10:44-46; Hechos 11:14-16; Hechos 15:7-9). Con el bautismo en el Espíritu Santo el creyente recibe experiencias como: la de ser lleno del Espíritu, Juan 7:37–39, Hechos 4:8); una reverencia más profunda para Dios, Hechos 2:43, Hebreos 12:28); una consagración más intensa a Dios y dedicación a su obra (Hechos 2:42); y un amor más activo para Cristo, para su Palabra y para los perdidos (Marcos 16:20).