Mitos y teorías de conspiración anti-navidad populares entre evangélicos

Un par de cosas interesantes sobre la Navidad que encontramos en las redes sociales, publicadas originalmente por el hermano Joshua E. Jiménez.

MITOS Y TEORÍAS DE CONSPIRACIÓN NAVIDEÑAS POPULARES ENTRE EVANGÉLICOS

Alegación N° 1: «¡Ustedes celebran saturnalia!»

– R: Mentira. Saturnalia comenzaba diciembre 17 y terminaba diciembre 23. Nunca estaba asociado con diciembre 25.

Alegación N° 2: «¡Ustedes celebran a Tammuz!»

– R: Mentira. Tammuz era una deidad que estaba asociado con el verano, cuando entre junio/julio, devotos (principalmente mujeres), llorarían su muerte. Por cierto, el calendario hebreo (sí, el bíblico), tiene un mes en su tocayo, Tamuz, que cae precisamente en junio / julio.

Alegación N° 3: «¡Ustedes celebran a sol!»

– R: Mentira. Es cierto, en 274 d. C., el emperador Marco Aurelio decretó el 25 de diciembre como el día del «sol invictus». Sin embargo, y por favor, síganme: los Cristianos, desde finales del siglo II, ya celebraban el nacimiento de Cristo el 25 de diciembre. Tenemos amplia evidencia literaria de esto. De hecho, el emperador romano probablemente hizo esto porque vio cómo la religión romana decaía, mientras que la fe Cristiana se expandía (y esto, a pesar de las persecuciones brutales romanas). De ahí que, en una maniobra política, trató de secuestrar una importante fiesta ya CRISTIANA y hacerla pagana. ¡¡¡No funcionó!!! La fiesta del «sol invictus» nunca pegó. Pero aquí estamos, 1.800 años después, ¡todavía celebrando a Cristo Jesús, el Señor!

Alegación N° 4: «¡Los druidas iniciaron la tradición del pino navideño!»

– R: Mentira. La costumbre del árbol se remonta a Bonifacio a principios del siglo VIII, el misionero que trajo la fe por primera vez a los temibles vikingos. El misionero, cuando vio que las tribus germánicas veneraban el famoso «roble de Thor», tomó un hacha y lo cortó él mismo, para demostrarles que la naturaleza no es DIOS. Luego, señalaría un árbol de hoja perenne, como símbolo de Cristo, que es el árbol de la vida eterna. En cuanto a la iluminación del árbol de Navidad, se remonta al ex-monje agustino, Martín Lutero, el reformador alemán, quien cuando vio la noche estrellada, llegó a casa y puso velas en el árbol como testimonio de la majestad de la creación de Dios.

Alegación N° 5: «¡Jesús no nació el 25 de diciembre, todo es una farsa pagana!»

– R: Mentira. Es cierto, nadie sabe con absoluta certeza cuándo nació Jesús. Sin embargo, la fecha del 25 de diciembre no se eligió al azar. Existe justificación razonable por la que algunos de los padres de la Iglesia escogieron esta fecha. Si tomas el hecho de que Zacarías estaba ofreciendo incienso en el Lugar Santo del Templo de Jerusalén durante la gran fiesta sagrada de Yom Kipur, que cae a finales de septiembre-principios de octubre (Lucas 1:9), entonces eso significa que Juan el Bautista nació 9 meses después, alrededor de junio / julio. Recordemos, que la Escritura nos dice claramente que Juan el Bautista fue concebido 6 meses antes que Jesús (Lucas 1:26, 36), por lo tanto, 6 meses después de junio / julio, sitúa el nacimiento de Jesús a fines de diciembre o principios de enero, lo que coincide exactamente con la tradición de Oriente y Occidente: la Occidente lo celebra el 25 de diciembre y Oriente el 7 de enero.

Alegación N° 6: «¡La Biblia no nos manda a celebrar el nacimiento de Cristo… sacrilegio, herejes, paganos, hijos del demonio!».

– R: Primero amigo, ten paz, realmente no entiendo tu fascinación con el mal. Pero de nuevo, estás equivocado. Magos del oriente celebraron el nacimiento de Cristo (Mateo 2:11), pastorcillos del área celebraron el nacimiento de Cristo (Lucas 2:17), Simeón, movido por el Espíritu Santo, celebró el nacimiento de Cristo (Lucas 2:28-32), la profetisa Ana, celebró el nacimiento del Señor (Lucas 2:38) y todas las huestes celestiales cantaron con júbilo al nacer el Cristo (Lucas 2:14). Claramente, entonces, hay suficiente precedente BÍBLICO para tomarse un tiempo del ajetreado año, y detenerse y meditar y celebrar este asombroso evento que dividió la historia por la mitad: la encarnación y el nacimiento del Hijo de Dios.

Y nuestro hermano añade:

«Por favor mi querido amigo: no escuches mitos y leyendas, que en la mente conspirativa y corrompida, abundan. ¿No quieres celebrar la Navidad porque tu conciencia no te lo permite? Bien, no lo celebres. Pero por favor, deja de perpetuar mentiras y calumnias contra tus hermanos que lo hacen. Recuerda, la mentira y condenar a otros basadas en esas mentiras, estas son las cosas que realmente son pecados graves.»

UN CONSEJO FINAL

«Las leyendas que afirman que la Navidad tiene orígenes paganos pertenecen a la misma categoría que los mitos que afirman que la Tierra es plana, que una raza alienígena avanzada hizo que la Tierra cobrara vida, y que Jesús y María Magdalena tuvieron un hijo juntos y la orden secreta y que controla todo el mundo «Opus Dei» tienen al descendiente escondido como el «santo grial» para cuando aparezca el anti-Cristo… Por favor, hermano Cristiano, si deseas abstenerte de todo lo relacionado con la Navidad, bien, adelante, esa es la libertad que tenemos en Cristo. Pero también, absténgase de propagar mentiras y levantar falso testimonio contra tus hermanos y hermanas en la fe, que con una conciencia limpia y un corazón puro, adoran a Cristo, el Rey, en cada Navidad.» (Joshua E. Jiménez)