Las redes sociales sin duda sacan lo peor de nuestra naturaleza caída. En las relaciones humanas sale lo mejor y lo peor de nosotros, lo que pasa es que ahora esas actitudes tienen un enorme altavoz y mucha más repercusión. Todos hemos pecado algunas veces en esta área. ¡Pero nunca es tarde para aprender y corregirnos!
Etiqueta: Libertad Cristiana
¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz entre los hombres de buena voluntad!
Nuestro segundo año enfrentando la nueva realidad de la pandemia está por terminar. Todo ha cambiado de formas que jamás imaginamos. No obstante, hay cosas que nunca cambian y seguirán acompañándonos por mucho tiempo, como esas personas que todos los años, con una insistencia admirable, al pasar la frontera de diciembre nos insisten hasta la desesperación en que la celebración de la Navidad es algo pagano en lo que no debe invertir tiempo un hijo de Dios. Armados con argumentos gastados cuya veracidad ellos mismos desconocen, textos sacados de contexto y mucho deseo de juzgar la vida ajena, este ejército de bienintencionados policías de la santidad ajena invaden los púlpitos, se toman las redes sociales y hasta pelean en muros ajenos de Facebook donde su opinión no ha sido solicitada (ni mucho menos deseada). Aparentemente han olvidado que cada uno es libre para celebrar o no hacerlo como mejor le parezca, y eso es una cuestión de conciencia.
¿Tenemos la obligación cristiana de recibir una vacuna contra el COVID-19?
Millones de creyentes evangélicos alrededor del mundo no tienen intención de vacunarse contra la COVID-19. En su decisión influyen los principios de la fe y la desconfianza en la ciencia. Las convicciones espirituales profundamente arraigadas o los argumentos contra fácticos pueden variar. Pero dentro del movimiento evangélico, las razones para no vacunarse se han extendido tan rápidamente como el virus que los funcionarios de salud pública esperan vencer mediante la inmunidad de grupo.
Mujeres y el uso de pantalones ¿Lo prohíbe la Biblia?
¿Cómo deben vestir las mujeres cristianas? Es una pregunta fácil de responder: Las mujeres cristianas deben vestirse de tal manera que honren a Dios con su cuerpo. Ese es un principio bien explicado en la Biblia y no tiene ninguna objeción (Romanos 12:1; 1 Corintios 6:19-20). El problema está en que este principio es aplicable tanto para hombres como para mujeres, y muchas personas (sobre todo algunos predicadores), con toda su buena voluntad, solo se lo recuerdan a las mujeres, destapando en el proceso un problema aún mayor de fondo. Ahora bien, si la mujer debe vestir decentemente, ¿Qué tipo de ropa debe usar para encajar con lo decente? ¿Debe usar sólo vestidos largos y ropa poco atractiva visualmente? ¿Faldas o pantalones? Y esto nos lleva a la pregunta que nos compete en esta ocasión: ¿Es pecado que una mujer use pantalones? Esta es una pregunta que surge de manera recurrente en ciertos círculos de creyentes, sobre todo en culturas como las nuestras y dependiendo del trasfondo denominacional. Y es que el uso de pantalones en la mujer ha sido un tema muy controversial en algunas iglesias, sobre todo en aquellas de corte pentecostal, las cuales frecuentemente tienden a satanizar su uso.