Por Fernando E. Alvarado
¿Se están acercando los pentecostales al amilenialismo? ¿Está el pentecostalismo listo para abrazar nuevos sistemas escatológicos ajenos o totalmente opuestos al dispensacionalismo? Esto podría ser cierto para aquellos que hoy están abrazando el dispensacionalismo progresivo. O eso es lo que nos sugiere el teólogo y escritor John Alifano, autor del libro “The Pretribulation Rapture Doctrine and the Progressive Dispensational System” ¡Y vaya que fue una grata sorpresa descubrir este libro!
Si eres pentecostal seguramente sabrás que por años los teólogos y líderes pentecostales han rechazado el amilenialismo considerándolo una falsa enseñanza. Las Asambleas de Dios, la más extendida de las denominaciones pentecostales incluso plasmó su rechazo al amilenialismo en su Constitución y Reglamento General:
“El Concilio General de las Asambleas no aprueba de la enseñanza amilenaria y la errónea filosofía que la acompaña que niega el hecho de un reino literal de Cristo en la tierra que durará mil años, y lo substituye con la teoría de que esta dispensación cristiana o de la iglesia es el milenio espiritual del que, dicen sus proponentes, profetizaron los escritores de la Biblia… Las credenciales están en peligro si se hace del asunto una controversia. Recomendamos que los ministros que se adhieren a cualquiera de los errores antes mencionados se refrenen de enseñarlos o predicarlos. Si persisten en dar énfasis a estas doctrinas hasta el punto de hacerlas un punto de controversia, su lugar en la Fraternidad se verá seriamente afectado (Lucas 21:34-36; 1 Tesalonicenses 5:9,10; 2 Tesalonicenses 1:4-10; Apocalipsis 3:10,19,20).”
Constitución y Reglamento Interno del Concilio General de las Asambleas de Dios, pp. 86-87

Esto, sin embargo, no ha impedido a sus miembros investigar por cuenta propia y disentir de la línea teológica de su denominación, abrazando el amilenialismo, el premilenarismo histórico, el posmilenialismo, y hasta otras variantes modificadas de dispensacionalismo. Incluso dentro de la denominación pentecostal más grande, las cosas parecen estar cambiando. Destacadas figuras de gran peso intelectual y teológico dentro de la denominación estadounidense, cómo Robert P. Menzies, han adoptado nuevas posturas, obligando al movimiento a reinventarse o, por lo menos, reevaluar sus bases e interpretación de los eventos futuros.
Según estudios internos, alrededor del 42% de los pastores de las Asambleas de Dios rechazan hoy en día el dispensacionalismo, identificándose en su mayoría como premilenaristas históricos y algunos pocos más como amilenialistas, o sustentando otras posturas escatológicas contrarias al dispensacionalismo (Véase: Daniel Isgrigg, The Origin, Development, and Future of Assemblies of God Eschatology, Bangor University, pp. 17, disponible en: https://research.bangor.ac.uk/portal/files/25506406/Isgrigg_PhD_2019.pdf).
Desde sus inicios a principios del siglo XIX, el principio básico del dispensacionalismo (una escuela de teología protestante que sostiene que Dios trata con la humanidad de diferentes maneras en diferentes períodos de tiempo llamados dispensaciones) ha sido que la iglesia e Israel son los dos pueblos de Dios con destinos claramente distintos. La distinción es de naturaleza teológica; específicamente, antropológica (perteneciente a la humanidad), soteriológica (perteneciente a la salvación), y escatológica (perteneciente a las últimas cosas).
El principio de distinción teológica siempre ha sido la piedra angular de la creencia de los dispensacionalistas en el rapto de la iglesia antes de la tribulación: la creencia de que en la primera etapa de la segunda venida de Cristo (la cual dividen en dos etapas o fases), él dotará a todos los que componen la iglesia verdadera con un cuerpo resucitado como el suyo, y transportará a todos al cielo (el rapto) antes de que comience en la tierra el período de siete años de agitación conocido como la Tribulación. El rapto marca el final de una dispensación en la que Dios centró su atención principalmente en la iglesia, y el comienzo de otra en la que Dios centrará su atención principalmente en Israel.

Hoy, casi dos siglos después, los dispensacionalistas progresivos han rechazado el punto de vista de una distinción teológica aguda. De su estudio de las Escrituras observan una suave distinción no teológica. Describen a la iglesia e Israel como diferentes dimensiones redentoras de la misma humanidad que comparten una salvación eterna holística y unificada. Un marco escatológico “ya” y “todavía no” es la piedra angular de su sistema.
En este interesante libro se argumenta que el dispensacionalismo progresivo no puede integrar la doctrina del rapto pretribulacional en su sistema dispensacional reconstruido sobre ninguna base de distinción teológica entre la iglesia e Israel. Hace esto exponiendo primero los sistemas teológicos de las tres formas principales de dispensacionalismo que han existido durante su historia, a saber, dispensacionalismo clásico, revisado y progresivo, y segundo, mostrando que cada uno de los tres tipos de distinción teológica, a saber , el carácter distintivo antropológico, soteriológico y escatológico están presentes en los sistemas clásico y revisado y, por lo tanto, estos sistemas pueden respaldar la integración del rapto, pero no están presentes en el sistema progresivo y, por lo tanto, este sistema no puede respaldar la integración del rapto. La tesis cierra con una explicación de por qué el dispensacionalismo progresivo es más compatible con el amilenialismo que con el premilenialismo.
¿Y que hay con el autor? Sin duda John Alifano sabe de lo que habla. Fue instruido en las doctrinas dispensacionales al ser parte de una de las conregaciones de los Hermanos de Plymouth durante más de veinte años y habiendo creído de todo corazón en el rapto pretribulacional de la iglesia. Pero todo eso cambió cuando, a los cuarenta años, se matriculó en el Regent College de Vancouver. Allí, lejos de todas las influencias dispensacionales, dedicó su atención al estudio de la teología sistemática, la teología bíblica y la hermenéutica. Su educación en Regent, que culminó con la redacción de esta tesis de grado A, lo llevó a rechazar la teoría del rapto pretribulacional (puedes adquirir su libro en Amazon, usando el siguiente link: Amazon.com: The Pretribulation Rapture Doctrine and the Progressive Dispensational System: Are They Compatible?: 9781581122244: Alifano, John A.: Books).
He de admitir que yo no creo en el amilenialismo ni mucho menos intento (al recomendar este libro) hacer apología de éste; como tampoco creo en el dispensacionalismo (sea este clásico, revisado o progresivo), al cual considero una innovación teológica cada vez menos creíble o sustentable bíblica y lógicamente. Creo que ambos sistemas dejan muchos vacíos teológicos y pecan, ya sea de literalismo extremo o de alegorismo excesivo. Me inclino más bien por el premilenarismo histórico-apostólico por considerarlo más fiel a la tradición de la iglesia primitiva y a las Escrituras. No obstante, reconozco que una revisión de la escatología pentecostal es más que necesaria y creo que, este libro en particular, puede ser de gran provecho para lograrlo. La escatología es una doctrina secundaria, ¡Pero vaya que crea problemas y divide a los cristianos! ¡Necesitamos hablar de estos temas con más cerebro y biblia que emociones y fanatismo!
